En los últimos años, las tasas turísticas y los impuestos ambientales turísticos se han convertido en herramientas fundamentales para los destinos que buscan equilibrar el crecimiento del turismo con la protección de su patrimonio natural y cultural.
En el caso de México, hogar de ecosistemas únicos, playas mundialmente conocidas y zonas arqueológicas de alto valor histórico, estos mecanismos fiscales son fundamentales para financiar la conservación, la sostenibilidad y la mejora de infraestructuras.
Sin embargo, entender qué impuestos existen, cuándo se aplican y cómo se pagan no siempre es sencillo, especialmente para los viajeros internacionales. En este artículo intentaremos aclarar todas las dudas con respecto a las tasas turísticas en México y explicar cómo la digitalización del proceso puede hacer que todo sea mucho más simple para huéspedes y alojamientos.
Principales impuestos turísticos en México
Antes de entrar al detalle, aquí tienes un listado de los impuestos turísticos en México:
- Impuesto sobre Hospedaje (ISH)
- VISITAX (Quintana Roo)
- EMBRACE IT (Baja California Sur)
- Derecho de No Residente (DNR)
- Impuestos ambientales turísticos locales (dependiendo del estado y/o ciudad)
Vamos a explorar a continuación cada uno en más profundidad.
1. Impuesto sobre Hospedaje (ISH)
El Impuesto sobre Hospedaje es probablemente la tasa turística más extendida de México. Se aplica en la mayoría de estados y consiste en un porcentaje sobre el coste del alojamiento que se suma al total de la reserva. La tasa exacta varía según cada territorio, pero suele encontrarse entre el 2 % y el 5 %.
Aunque muchos viajeros no lo perciben de forma directa (normalmente se integra en el precio total del hotel), es importante comprender su función. Los fondos recaudados se destinan a iniciativas de promoción del destino, mantenimiento de infraestructura turística, mejora urbana y, en algunos casos, programas orientados a la sostenibilidad ambiental.
Para los establecimientos, gestionarlo correctamente es clave para cumplir con las regulaciones locales. Y para los huéspedes, es un coste inevitable que forma parte de la contribución al desarrollo económico y social del destino.
2. VISITAX, en Quintana Roo
En estados mexicanos de gran volumen turístico como Quintana Roo (donde se encuentran Cancún, Playa del Carmen, Tulum, Cozumel e Isla Mujeres, entre otros), se puso en marcha VISITAX, una tasa turística obligatoria para visitantes extranjeros.
Se trata de un impuesto diseñado para apoyar la infraestructura turística y los programas de sostenibilidad en una región cuya afluencia de turistas es una de las más altas del país. A diferencia de otros impuestos, VISITAX debe abonarse de forma digital a través de una plataforma del Gobierno de México, ya sea antes del viaje o durante la estancia. Tras el pago, el viajero recibe un comprobante digital o código QR.
Uno de los motivos por los que genera dudas es la variedad de páginas no oficiales que han surgido. Por ello, es fundamental pagar únicamente a través de canales legítimos.
3. EMBRACE IT, en Baja California Sur
Baja California Sur, otro destino en auge gracias a localidades como La Paz, Los Cabos o Loreto, ha lanzado recientemente su propia tasa turística: EMBRACE IT. Esta contribución se dirige principalmente a visitantes extranjeros que permanezcan más de 24 horas y está enfocada al desarrollo comunitario, la preservación del entorno y el fortalecimiento de servicios públicos relacionados con el turismo.
Su principal característica es que es un impuesto 100 % digital, lo que permite simplificar su gestión, evitar largas filas y adaptarse al viajero moderno, que espera realizar todos los pagos desde su móvil. Además, su enfoque ambiental encaja con una tendencia creciente en México: el uso de impuestos ambientales turísticos para financiar proyectos de conservación.
4. Derecho de No Residente (DNR)
El Derecho de No Residente (DNR) no es propiamente un impuesto turístico, pero sí afecta directamente a muchos viajeros que ingresan al país sin residencia mexicana. Funciona como un derecho migratorio, pagado en la entrada al territorio, que grava la estancia temporal de visitantes según los criterios establecidos por las autoridades.
En muchas ocasiones, este cargo está incluido en el billete de avión, aunque no siempre es así. Por eso, es recomendable que los viajeros revisen su recibo o itinerario para asegurarse de si ya lo han pagado o deberán abonarlo al llegar.
5. Impuestos ambientales turísticos locales
Algunas regiones del país están avanzando hacia esquemas de impuestos ambientales turísticos, que buscan financiar acciones de conservación de playas, reservas naturales, arrecifes y áreas protegidas. Estos cargos son resultado de un esfuerzo creciente por promover un turismo más sostenible y responsable en México.
Si bien no existen todavía impuestos ambientales federales aplicables en todo el país, municipios costeros o áreas naturales protegidas pueden establecer los suyos. Aunque suelen ser cantidades pequeñas, contribuyen de forma significativa al mantenimiento de recursos naturales que son esenciales para la experiencia turística en México.
Preguntas frecuentes sobre la tasa turística en México
1. ¿Dónde se paga la tasa turística en México?
Depende del impuesto:
- El ISH se paga directamente en el alojamiento.
- VISITAX y EMBRACE IT se pagan online, antes o durante el viaje.
- El DNR se paga al ingresar al país o ya viene incluido en el billete.
- Los impuestos ambientales suelen cobrarse en alojamientos o centros turísticos locales.
La tendencia general es hacia el pago digital para mejorar la eficiencia y evitar demoras.
2. ¿Quién paga la tasa turística en México?
No todos los viajeros pagan todos los impuestos. En general:
- El ISH aplica a cualquier huésped, nacional o extranjero.
- VISITAX y EMBRACE IT se aplican a personas extranjeras sin residencia en México.
- El DNR aplica a ciertos visitantes internacionales según su tipo de entrada.
- Los impuestos ambientales turísticos dependen del destino y las actividades que realice el viajero.
3. ¿Por qué existen estos impuestos turísticos?
Las razones principales incluyen:
- Financiar la protección de ecosistemas y áreas naturales.
- Invertir en infraestructura turística y urbana.
- Mejorar servicios públicos utilizados por visitantes.
- Impulsar modelos de turismo sostenible.
- Reducir el impacto ambiental generado por la actividad turística.
En otras palabras, ayudan a que el turismo siga siendo una actividad económica viable y beneficiosa a largo plazo.
Digitalización del sector turístico: simplifica el pago de tasas con Civitfun
Los viajeros actuales, y en especial las generaciones más digitales, valoran cada vez más los procesos rápidos, sin contacto y 100 % online. Diversos estudios sobre tendencias de viaje indican que más del 70 % de los huéspedes prefieren realizar los pagos y trámites antes de llegar, y que los procesos digitales influyen directamente en su nivel de satisfacción.
En este contexto, la digitalización no es solo una mejora operativa: es un factor decisivo para ofrecer una experiencia de huésped actual, fluida y sin esperas.
Cómo digitalizar los pagos de tasas turísticas
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- Pagos de la reserva, abono de tasas turísticas, impuestos y complementos de la reserva.
- Eliminación de procesos manuales y reducción de errores administrativos.
- Comprobantes digitales automáticos que evitan confusiones.
- Mayor transparencia y confianza para el cliente.
- Integración con PMS y motores de reserva.
- Experiencia sin fricciones que mejora la satisfacción del huésped.
Con Pagos de Civitfun, los viajeros pueden cumplir con las tasas turísticas obligatorias antes de llegar y desde cualquier dispositivo. Así, tu alojamiento ahorra tiempo mientras reduce incidencias en recepción.
Conclusión
La tasa turística en México y los diferentes impuestos turísticos pueden parecer complejos al principio, pero cumplen un papel esencial en el desarrollo sostenible del turismo.
Para simplificar su gestión, reducir fricciones y ofrecer una experiencia plenamente digital, Pagos de Civitfun permite integrar y automatizar el pago de los impuestos que deban abonarse en el alojamiento como el ISH y otros impuestos ambientales de México, evitando sorpresas y facilitando el cumplimiento normativo para alojamientos y viajeros.
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